martes, 31 de julio de 2012

El cuento de nunca acabar



En un mundo cargado de estímulos sexuales, un grupo cada vez más amplio se define por la antítesis. Con bandera e iconos propios, sus representantes nos cuentan qué hacen cuando se quedan sin yerba.

Yo podría haber sido salvaje, podría haber sido libre. Pero la naturaleza hizo sus trucos en mí”. En primera persona, la letra de Pretty Girls Make Graves (The Smiths) en la voz de Morrissey es mucho más que una confesión de partes: es un manifiesto. Y, como tal, tomado y retomado en foros sobre el tema del que podría estar hablando: la asexualidad. Entonces, ¿no al sexo? O mejor: ¿de qué hablamos (nosotros y Morrissey) cuando hablamos de no coger? En un mundo re-cargado de sexo & genitalidad al palo (y estímulos ad hoc ), un grupo numeroso se alza en contra y da vuelta la frase sobre tomar mate: si no hay yerba, no hacemos nada. ¿Qué es la asexualidad? Después de la heterosexualidad, la homosexualidad y la bisexualidad…el cuarto sexo. Nada que ver con el celibato o la virginidad (de Britney a Wanda Nara), que parecía un boom en el cambio de siglo aunque estaba fogueda por la dirigencia Bush. El celibato es una decisión, la asexualidad no es una opción. “Se es”, definen cual emblema existencial- filosófico.
Según datos difundidos por la Red para la Educación y Visibilidad de la Asexualidad (AVEN), un uno por ciento de la población es asexuado. Fácil: entre cien personas que se reúnan para loquesea (en la facu, trabajo, boliche), una carece de deseo sexual y decide no tener relaciones en su vida. Uno de ellos, o vos.
Y las cifras siguen: 57 por ciento son mujeres, 74 por ciento son universitarios, 47 por ciento se denominan heterrománticos, 19 por ciento son arrománticos. Esto último lo explica Hebe Lulii Cattáneo, una platense de 19 años que cursa la carrera de Derecho y se unió a AVEN porque sintió que “había encontrado mi lugar”. “Dentro de los asexuales y, según la atracción emocional o no, pueden diferenciarse los románticos y los arrománticos. Los primeros son los que sienten atracción amorosa (no sexual) hacia otro, pueden ser heterorrománticos, homorrománticos o birrománticos. En cambio, los arrománticos no sienten atracción amorosa. Igual pueden formar parejas y familias, basándose en el interés y cariño mutuo”.
Lulii cuenta: “Durante toda mi vida sentí indiferencia hacia el sexo, nunca me pareció algo divertido como a otras personas. Googleando, encontré la red AVEN y leí cientos de historias de otras personas a las que les pasaba lo mismo que a mí. Entendí que no estaba equivocada, que era asexual. Y les conté a mis amigos porque necesitaba expresar la felicidad que el descubriendo me había causado”. ¿Una nueva manera de salir del clóset? Y con lema propio, que comparten en comunidad: “En broma nos decimos: ¿para qué tener sexo si podemos disfrutar de una buena porción de pastel”. Torta (sin segundas lecturas), “especialmente de chocolate”.
“El hecho de que actualmente un 60 por ciento de la comunidad de Estados Unidos y de Hispanoamérica (alrededor de 19 mil jóvenes) son menores de 25 años evidencia que necesitamos hablar sobre las relaciones humanas y la sexualidad en otros términos”, dice desde Colombia Johanna Villamil, de 26 años. Ella agrega que basa su “ser asexuada” en la experiencia. “Yo empecé a tener relaciones sexuales al igual que muchas personas, como gran acontecimiento de la adolescencia. Y, aunque siempre he tenido encuentros sexuales agradables, durante aquella época estas situaciones estaban rodeadas de un ‘sin sentido’. Rápidamente, me di cuenta de que no era fácil hacer lo que para todos era algo natural o intuitivo”.
¡Fucking sex! Los integrantes de la comunidad sueñan con un tipo de persona y un tipo de amor. Como Carla de Renzo, de 20 años y origen porteño: “Sólo quiero pureza y ternura. Tuve una crisis de identidad hace tres años. No entendía qué me pasaba. Me asqueaba escuchar que todos hablaban de los que se apretaron o con quienes se acostaron. Así empecé a poner en google porque no aguantaba más. Y lo encontré. Desde entonces, digo con todo mi orgullo: soy asexual”. Y agrega que puede haber una media naranja: “Es genial encontrar varones asexuales. Personas adultas. Decís: ‘wow, un hombre sin interés sexual…¡lo quiero ya!’ Lo que la gente confunde es sexo con amor”.
Lulii se explaya: “Las necesidades emocionales dependen de cada persona. Hay asexuales que están más felices solos y otros que prefieren formar una familia o una pareja estable”. Pero, más allá del no contacto sexual en este caso, hay una diferencia entre amigos y pareja: “En pareja, uno tiene intimidad. Lo que ocurre es que, en la mayoría de los casos, la gente entiende por intimidad todo aquello abarcado por el sexo. Y la realidad es que es sólo un aspecto”. Sin reglas en las emociones, Johanna también habla de que lo natural es no seguir “instrucciones”: “Tengo una relación VIP con un chico hace 6 años. Es la prueba de que la felicidad se puede construir afuera de las sábanas”.
http://www.si.clarin.com/cuento-acabar_0_727727230.html

3 comentarios:

Gof dijo...

Pues... respeto esta orientación tal como respeto todas las orientaciones que existen en el planeta... sólo no la comparto y me da pánico encontrarme a una pareja así para mi. No sé si estoy mal, o contaminado. La verdad es que durante toda mi vida todas las personas que he conocido (TODAS Y SIN EXCEPCIÓN) me han dicho que estoy mal en algo de mi vida (actitudes, acciones, gustos, etc).

Yo amo el sexo y las sensaciones y sentimientos que me produce. Sea con la persona amada o con alguien con quien la atracción es mutua. Y me encuentro en una disyuntiva muy grave. Siento, y por más que busco aceptar esto, que estoy envolviendome en una relación de pareja con una mujer que, sospecho, es asexual. Es una mujer perfecta! Dos licenciaturas, locutora de radio, fotógrafa, periodista, con gusto por el cine, profesora de periodismo, es hermosa y me valora y quiere tal cual soy. Pero se comporta demasiado reservada en el sexo.... y yo soy demasiado sexual.

Bien dicen que el que por su gusto muere, hasta la muerte le sabe. Me gusta, me encanta el sexo, y temo que mi pareja sea asexual. Me tengo miedo, no quiero serle infiel, pero a mi sí me llega ese impulso, esa electricidad que me recorre todo el cuerpo y el alma (lo juro, lo siento en el alma misma). Y tengo miedo de cometer un error. Hasta ahora he desistido de ello pero el deseo que me produce mi enamorada me hace sentir ansioso y equivocado.

Cada que toco el tema del sexo, es muy tímida pero busca cómo hacerme ver que para ella estamos bien asi. Y en serio la quiero como es. Solo creo que si quiero seguir con ella tendré que reprimir algo que es parte de mi ser y tengo miedo de que así sea. La quiero mucho.

La asexualidad no es mala y la respeto. Sólo no va conmigo... y por eso me encuentro en esta disyuntiva, porque la quiero (a mi preja) y estar en esta posición me pone triste.

Otra opinion que tengo acerca de las personas asexuales va muy ligada a mi experiencia con conocidos o conocidas que son homosexuales, siendo uno heterosexual, por ejemplo: much@s de ell@s se comienzan a quejar al ver a una pareja hetero demostrarse su amor con besos o caricias, o simplemente al hablar uno de su pareja. Se ha convertido en una discriminación también: desdeñan a los "bugas" (como llaman a la gente heterosexual). Así que mientras las personas asexuales respeten a una persona sexual y no intenten cambiarnos (al menos proactivamente) todo estará bien.

Mientras, yo sigo en mi encrucijada. :(

Solete dijo...

Vaya Gof, a mí me pasa todo lo contrario, soy asexual. No creo que estés mal o contaminado simplemente tienes unas necesidades, necesidades que no coinciden con las de tu chica... uffff no me gustaría estar en vuestro lugar. Suerte amigo ;)

Lucía dijo...

Gof, es muy hermoso poder sentir todo lo que tú sientes y no me cabe duda de que eres un hombre apasionado. Estoy segura de que muchas mujeres desearían encontrarse con alguien así, que siente el sexo como tú dices, desde el alma (es muy bonito).
No sé qué decirte salvo que en mi opinión en una pareja lo primero que debe haber es confianza, respeto y complicidad. Si vuestra pareja funciona así y a pesar de ello el sexo cojea por parte de uno de los dos, lo mejor es hablarlo cuanto antes. Sin presiones, sin prisas ni imperativos, dile lo que la deseas y deja que ella te exprese lo que siente. Si ves que tiene dudas sobre su sexualidad puedes invitarla a visitar esta web y yo hablaré con ella encantada. Sin embargo, con todo lo que cuentas de ella, es poco probable que tenga dudas y más bien, creo, puede que sea simple timidez o bien que aún no está preparada y sintiendo como tú. Dale tiempo si es que es así pero no dejéis de hablar porque el sexo es muy importante en una pareja. Aunque yo sea asexual entiendo que es una forma de expresión entre dos personas que en un momento determinado se dicen lo mucho que se desean y que sintonizan para compartir algo precioso.
Gracias por tu respeto hacia nuestra condición y no dejes de visitarnos siempre que quieras. Espero haberte podido ayudar en algo.